LAS AGRESIONES A DOLORS NADAL Y A ROSA DÍEZ

CIUDADANOS-PARTIDO DE LA CIUDADANÍA, BALEARES

COMUNICADO

LAS AGRESIONES A DOLORS NADAL Y A ROSA DÍEZ EN LA UNIVERSIDAD SON, POR LO MENOS, DELITOS Y TAL VEZ DELITOS TERRORISTAS

Otra vez hemos asistido al bochornoso espectáculo de un grupo de exaltados que ha impedido a Dolors Nadal y a Rosa Díez, candidatas del PP y de UPyD al congreso, respectivamente, manifestar sus ideas. Ayer se intentó con María San Gil, antesdeayer con Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, y con otros militantes de Ciudadanos, mañana será con otro, sin duda. Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía de Baleares quiere no sólo mostrar su solidaridad con Dolors Nadal y Rosa Díez y su condena de este tipo de actos sino también calificar estos actos como delito y tal vez como violencia terrorista. Si el objetivo del terrorismo es crear un miedo insuperable, mediante una actividad planificada y reiterada, en un grupo de personas para que no puedan exponer sus ideas políticas, la actitud de esos jóvenes parece responder a ese objetivo: amedrentar a todos aquellos que comparten las ideas de Nadal, Rosa Díez, María San Gil, Albert Rivera o cualquier otro.

También Ciudadanos quiere advertir de lo obvio: que este tipo de actos se repiten constantemente en una sola dirección: grupos independentistas o nacionalistas radicales o de extrema izquierda atacando a personas o políticos que hacen gala de su no nacionalismo o antinacionalismo, sin importarles el hecho, o tal vez por eso, de que al revés nunca se produce la agresión.

Y una vez más Ciudadanos quiere dejar claro que no sólo son responsables los que cometen estos actos sino todos aquellos políticos que, amparados en la inocente seguridad de que ellos nunca serán objeto de tales agresiones, se dedicarán durante los días venideros a repartir

denominaciones eufemísticas, convirtiendo tales actos en “boicot”, “algaradas”, “incidentes”, “actos de ejercicio de libertad de expresión”, o, en el colmo de la hipocresía, convirtiendo a la víctima, Nadal, Rosa Díez, María San Gil, Albert Rivera u otros, en agentes provocadores.

Unas elecciones son una fiesta de la libertad de expresión, de la oferta de ideas. Actos como el de ayer y el de hoy son un atentado directo contra la democracia. El fiscal o cualquier juez debería actuar de oficio: impedir o tratar de impedir, y más cuando se usa la fuerza, la expresión de ideas es simplemente, en el mejor de los casos, un delito.